Fracaso escolar en España

Causas del Fracaso escolar en España

El fracaso escolar es uno de los problemas que hoy en día, más incidencia tienen en adolescentes y más preocupan a padres. Este tipo de problemas pueden tener un trasfondo psicológico.

En muchas ocasiones los niños y jóvenes se encuentran desmotivados, apáticos, no encuentran sentido a lo que hacen, …

Dejando de lado como influyen en este tipo de problemáticas los continuos cambios en las leyes de educación, desde la psicología, nos interesamos en ver cuáles son los factores que subyacen a estes problemas de fracaso. En la última etapa de escolaridad obligatoria los adolescentes se encuentran ante un dilema tanto personal, como escolar y laboral. Es importante la información acerca de las posibilidades que ofrece el sistema educativo, pero también lo es la función que desempeña la red que lo sostiene, para establecer una motivación intrínseca a la propia formación tanto educativa como personal.

Desde la psicología podemos trabajar con el niño o adolescente, sin olvidar que éste forma parte también, de un complejo sistema que incluye a padres y a instituciones educativas.

Nuestro gabinete de psicólogos colegiados en Madrid puede ayudarte a trabajar y tratar estos primeros síntomas de ansiedad e incertidumbre por el que pasan muchos adolescentes al final de su etapa escolar obligatoria.

Psicoafirma cuenta con un equipo de psicólogos que te ayudarán a superar la apatía y desmotivación hacia los estudios

En muchas ocasiones los niños y jóvenes se encuentran desmotivados, apáticos… Provocando el llamado Fracaso Escolar

 

Muchos de los problemas intrínsecos al Fracaso Escolar en España, están asociados a que el adolescente no encuentra un lugar propio en el que identificarse, inmerso en un marco socio-cultural en continuo cambio.

Uno de los autores más destacados de la rama educativa es Piaget que estudió ya desde principios del siglo XX, cuales son las etapas de construcción de la inteligencia. Éste desarrolló su teoría constructivista del aprendizaje, para comprender como comienza a estructurarse el pensamiento desde los primeros años de vida y como se desarrolla éste mediante procesos de asimilación y acomodación.

Para Piaget, existen cuatro etapas principales en el desarrollo cognitivo, daremos aquí algunas breves directrices para acercaros su teoría.

  • De los 0 a los 2 años la etapa sensoriomotora, nos indica que el niño aprende principalmente a partir de sus reflejos, de sus sensaciones corporales y de lo que asimila por sus sentidos. Desarrolla una inteligencia sensorial y motriz. Al final de esta etapa el niño comienza a utilizar el pensamiento simbólico (…puede imaginar…).
  • De los 2 a los 7 años se encuentra la etapa preoperatoria, cuya principal característica es la aparición de las acciones mentales.
  • De los 7 a los 11 años la etapa de operaciones concretas hace referencia a que el niño basa su aprendizaje en lo concreto, y aparece el pensamiento lógico que se desarrollará en la última etapa.
  • De los 12 años en adelante, la etapa de operaciones formales habla de que el cerebro ha consolidado habilidades para trabajar con contenidos abstractos.

Es muy importante para el desarrollo adecuado de estas etapas que el niño-adolescente tenga un completo equilibrio psicológico y emocional, para que nada interfiera en la evolución natural del conocimiento.

Bajo este prisma hay que entender la dinámica educativa en la que estamos inmersos, valorando la adecuación de los contenidos educativos al nivel de desarrollo cognitivo de la persona.

Los niños reciben numerosa estimulación, pero no podemos olvidarnos de los componentes afectivos y sociales que la acompañan, dado que en conjunto, forjan la base de la personalidad.

D.Winnicott, un conocido pediatra y psicoanalista estudió la importancia de los componentes afectivos y emocionales del desarrollo del niño. Compartiendo su pensamiento, como equipo clínico cualificado, pensamos que no podemos desvincular los factores emocionales de los puramente cognitivos.

Muchos de los problemas de fracaso escolar no tienen que ver, o no están directamente relacionados con el cociente intelectual, sino que más bien, están ligados a una desafección emocional, a problemas de ansiedad, a factores de baja autoestima, a problemas de acoso escolar o factores sociales.

Si crees que tu hijo/a puede desarrollar problemas de fracaso escolar o ya los tiene contacta con nuestro psicólogo online de forma muy sencilla a través de nuestra Clínica Virtual.

Cómo evitar el Fracaso Escolar:

Desde nuestro marco integrador nuestros psicólogos trabajan terapias psicológicas desde todas estas perspectivas, tomando como centro a la persona.

¿Te preocupa que las notas de tus hijos hayan bajado sin motivo aparente? ¿Ves que tus hijos están desmotivados a la hora de estudiar? ¿Sientes que a tu hijo le cuesta mantener relaciones sociales en el colegio? ¿Ves a tu hijo aislado o triste? ¿Tu hijo se pone nervioso a la hora de hacer exámenes?

Desde la psicología ayudamos a crear un marco con la persona, en este caso con el niño o adolescente, desde el cual construir un espacio de reflexión en el que establecerse como sujeto activo, motivado… Nuestra perspectiva relacional, nos ayuda a contemplar este tipo de problemática desde una visión integral, incluyendo a la persona en su compleja red social.

El gabinete psicológico de Psicoafirma realiza una evaluación profunda teniendo en cuenta la singularidad de la persona y su situación. Nuestro afán consiste en sostener un estilo de aprendizaje que evite el fracaso escolar, haciendo hincapié en establecer un marco integrador para trabajar con el alumno de forma personalizada y ayudar a los padres a ser agentes constructivos de una red educativa proactiva.

Abordamos el fracaso escolar, apoyándonos en un equipo de psicólogos colegiados y debidamente cualificados, que apuestan por un trabajo integrador, que incluye factores intelectuales, sociales, emocionales…

Sobre el autor

Añade tu comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.