¿Buscas un experto en Fracaso Escolar para tu hijo?
Una de las áreas que más preocupa a padres y profesores, en el contexto educacional del niño es el Fracaso Escolar. Está situación se presenta cuando un niño no alcanza el nivel de rendimiento medio esperado para su edad y nivel pedagógico.
Abordar el fracaso escolar es un tema complejo. Pero antes de empezar deberíamos plantearnos ¿qué es el fracaso escolár? ¿qué causa fracaso escolar? ¿cómo afecta a los niños el fracaso escolar? ¿cómo presiona a los padres y a los profesores el fracaso escolar? ¿el fracaso escolar es un problema o es un síntoma de un problema subyacente más profundo.
El fracaso escolar en España:
- Uno de cada tres niños en España no termina los estudios primarios
- Sólo la mitad de los niños que cursan bachiller lo terminan.
- La mitad de los jóvenes que empiezan en la universidad la abandonan.
Definición de fracaso escolar
Desgraciadamente el único método para evaluar a nuestros hijos en el sistema escolar son las calificaciones. Calificaciones bajas son consideradas fracasos mientras que calificaciones altas son consideradas éxitos. Sin embargo, en el abordaje del fracaso escolar muchas veces se olvidan las competencias o capacidades de nuestros hijos.
En un marco práctico, obtener un determinado nivel de calificaciones determina se se alcanza o no el éxito o fracaso escolar. Sin embargo, la experiencia nos demuestra que la percepción es incompleta. Deberíamos hablar entonces de rendimiento académico.
Factores que influyen en el rendimiento escolar y causas del fracaso escolar
Las causas pueden ser múltiples, pudiendo deberse a Trastornos de Aprendizaje, Trastornos en la Psicomotricidad, Trastorno por Déficit de Atención y/o Hiperactividad (TDAH), Problemas de Comportamiento, Problemas Emocionales o Metodología Didáctica inadecuadas.
- En relación a los Trastornos de Aprendizaje, el niño puede presentar Dislexia, mostrando gran dificultad para distinguir letras o grupos de letras, su orden y ritmo dentro de una palabra y/o frase, ocasionando un nivel de lectura y comprensión significativamente inferior al esperado para su edad o curso escolar.
En muchas ocasiones se asocia con un trastorno específico de la escritura, Disgrafia, influyendo negativamente en el aprendizaje escolar, invirtiendo letras, omitiéndolas, etc.
Es habitual, presentar de manera paralela a los trastornos de aprendizaje descritos, Discalculia, alterándose el cálculo aritmético, pudiendo confundir números, invertirlos, etc. - En relación al Desarrollo Psicomotor, un retraso en cualquiera de las áreas psicomotrices es posible que repercuta negativamente en el aprendizaje escolar, pudiendo aparecer inestabilidad en la marcha, torpeza en los movimientos, descoordinación, etc, siendo necesario trabajar el dominio del cuerpo y sus relaciones con el entorno.
- El Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, comprende un patrón persistente de conductas de desatención y/o hiperactividad que puede afectar de manera importante al rendimiento escolar.
- Los estilos educativos de los padres pueden influir en el rendimiento académico del niño. Padres ecesivamente severos y disciplinados pueden hacer creer al niño que sus capacidades no son suficientes y pueden hacer que el niño no se sienta útil, que se sienta desmotivado y que desista de intentar siquiera el esfuerzo cognitivo de aprender. Si en la misma unidad familiar tenemos padres con estilos educativos diferentes, el niño puede sentir un gran desconcierto que se traducirá en confusión, fracaso escolar, indiferencia hacia los padres…
- Las dificultades en el comportamiento, como la Agresividad, la Desobediencia, las Rabietas, el Negativismo, etc. constituyen problemas habituales en la infancia, de hecho habitualmente son la causa más frecuente de fracaso escolar, ocasionando grandes problemas de adaptación.
- Por otro lado los problemas de base emocional, como la Ansiedad o la Depresión , pueden estar en la base de muchos problemas de aprendizaje, afectando a la capacidad de concentración y de rendimiento del niño. Un niño que siempre ha tenido buen rendimiento en sus aprendizajes, y que comienza a mostrarse triste, preocupado, inhibido, etc, podría orientarnos hacia este problema.
- En ocasiones el niño o adolescente desarrolla Metodologías Inadecuadas de estudio, careciendo de habilidades para sintetizar, o comprender la información, empleando mayor inversión de tiempo y obteniendo peores resultados, lo genera una experiencia de aprendizaje negativo muy ligada al fracaso.
- Un problema a tener en cuenta en el tratamiento del fracaso escolar y del rendimiento académico, son las adicciones infantiles a la televisión, el móvil, la tablet… Es fundamental el control y el autocontrol en el ámbito familiar, no sólo en el niño.
¿Cómo poner fin al fracaso escolar?
Para resolver con éxito el problema psicológico, debido a la variabilidad causal, es necesario realizar una Evaluación cuidadosa y completa de las capacidades físicas y psíquicas del niño, considerando diferentes perspectivas de análisis; en el plano psicomotor, desarrollo neurológico, estabilidad emocional, ambiente educativo y relacional familiar, tanto con padres como con profesores.
Es importante determinar la causa del problema e intervenir de manera rápida y adecuada. Es necesario que el niño, además, distinga entre las capacidades de aprender y el deseo de hacerlo, su motivación.
El proceso de evaluación nos ayudará a definir el foco de atención, planificando programas de tratamiento eficaces, personalizados, que consideren la intervención tanto con el niño, padres y/o profesores, favoreciendo el proceso de aprendizaje.
Nuestros programas de tratamiento psicológico del fracaso escolar se fundamentan en:
- Favorecer unas Técnicas de Aprendizaje adecuadas, de manera que permitan organizar y planificar las tareas, generando una sistemática de trabajo adecuada y eficaz, adaptada tanto a las capacidades del niño como a las exigencias escolares.
- Establecer una Relación Terapéutica de Ayuda, favoreciendo un clima de colaboración y de entendimiento, aproximándonos al origen del problema.
- Evaluar la sintomatología que el niño o adolescente pueda presentar, tanto en el área emocional, como psicomotora o neurológica.
- Diseñar un Plan de Tratamiento adaptado a las necesidades de cada caso en particular, comenzando por la resolución de los problemas que generan más dificultad en el ámbito escolar.